Según me cuenta mi tío, en la Guerra Civil española (1936-1939) unos hombres que habían sido destinados a la Región de Murcia procedentes de Valencia huyeron del ejército a traviesa campo. Ellos se dedicaban al contrabando para poder sobrevivir, vivían en cuevas y robaban los alimentos y útiles, por eso no los podían ver o los matarían; así que eran muy cautelosos pues la policía los estaba buscando.
Cuando se acabó la Guerra Civil, ganó el bando contrario (los nacionales de Franco, pues ellos eran republicanos); la policía los seguía buscando con perros sabuesos. Como los prófugos valencianos se conocían muy bien la zona, huían de Molina a Alcantarilla, a La Torre Alta, etc, y no los conseguían atrapar.
Un día les tendieron una trampa en Molina de Segura: los policías se hicieron pasar hombres que querían traficar con ellos, los persiguieron y no les dieron alcance hasta la Casa Ros. Cuando llegaron allí, se introdujeron en la casa de un hombre rompiendo las puertas, pero no se escondieron lo suficiente porque fueron fusilados en esa misma casa, en la Casa Ros.
Rocío Martínez Fernández. 2º A
Rocío, me alegro de verte por el blog este año. Sé que tu nueva profesora de Lengua está encantada contigo. Sigue como hasta ahora y, de vez en cuando, escribe algo para que nos deleitemos con su lectura en este blog.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho esta historia. De ella aprendemos que las guerras son muy crueles y, especialmente, las guerras civiles, entre hermanos y gentes del mismo pueblo. Ojalá esto no se repita nunca.
Un saludo
Muchas gracias Mari Sol.
ResponderEliminarUn saludo.
Rocío, nos ha gustado mucho esta historia tan triste que te contó tu tío y nos ha impactado porque ocurrió en Molina. Concretamente a mí, Becky, me ha impresionado más porque vivo cerca y me acabo de enterar de dónde está la Casa Ros.
ResponderEliminarCuéntamos más historias para que las leamos los días de huelga.
Un saludo y nos vemos por el instituto.
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ResponderEliminarEs muy interesante conocer la historia a través de las vivencias de nuestros familiares.
ResponderEliminarNo sabes la suerte que has tenido con tu tío, al poder escuchar a través de su relato parte de nuestra historia local.No dudes porque yo no dudo de que es real
Me ha gustado mucho.¡ánimo y sigue investigando y escribiendo!
ISABEL MARTINEZ