lunes, 23 de noviembre de 2015

Diario de la clase de Lengua

Martes, 17 de noviembre de 2015, cuarta hora.

No lográbamos obtener el silencio absoluto y no me gustaba, pues así era incapaz de concentrarme.

Definitivamente tenía que buscar la inspiración en cualquier rincón de aquella aula. Bajé la cabeza y, de repente, me di cuenta de que había miles de cosas que redactar en ese momento.

Todos escribían, alguno cuchicheaba con el vecino y otros oíamos a la profesora explicar cosas sobre los verbos, adjetivos y sustantivos.

Logré llenar una hoja completa de palabras. Me cansé mucho, pero valió la pena.

En una ocasión, un compañero intentó molestar, pero como estábamos cada uno en sus cosas nadie le hizo caso.

Mari Sol daba algún apunte a los alumnos; cosa que a mí me pareció muy bien. Ella intentó escribir su diario y, a pesar del silencio, no sé si lo consiguió.

Me sorprendió que los alumnos mirasen a los demás con ojos de halcón. Era la primera vez que veía a los compañeros fijarse tanto en los otros.

Algunos escribían fluidamente sin apenas alzar la cabeza, cosa que me impresionó.

Para mí la clase de Lengua fue muy útil, porque era la primera vez que yo hacía el diario dentro de clase. También me di cuenta de que nosotros éramos los observadores.

                                               Lorena Palazón Caravaca, 1º D

CÓMO CONOCÍ A MI PERRO GOLFO


Un día mi madre me preguntó si quería tener un perrito. Me dijo que había pensado regalarle uno a mi hermana pequeña porque cumplía dos añitos. A mí me gustó la idea.

Cuando nos lo entregaron, se lo dejamos a una amiga para que nos lo cuidase hasta que llegara el día del cumple. Y llegó. Yo estaba muy nerviosa. Vi cómo a la vez que subía la caja en la que iba, el perro la iba mordiendo.

Pasaron un par de días y al perro le pasaba algo. Mi madre me dijo que esos síntomas eran de epilepsia. Como no nos podíamos permitir la medicina, mi madre se lo llevó a la mujer que nos lo vendió y le dijo que el perro estaba enfermo. Nos lo cambió por el perrito que tengo ahora.

Es un Bichón maltés de pelo blanco, como el otro. Se llama Golfo y tiene dos años humanos. Este perrito me lo entregaron sucio y con el pelo muy enredado.

 Golfo me hace compañía en los momentos que necesito algo más.

                                                                                                                                                                    Tiare García Domínguez, 1º A

martes, 17 de noviembre de 2015

Mi reflexión a propósito de la obra de teatro LAS AVENTURAS DE TARIK Y SALAH

LUCHA POR TUS SUEÑOS

Mari Sol tiene razón, tenemos que luchar por nuestros sueños.
Mi sueño es llegar a trabajar en el mundo de la medicina. Pero sería mejor todavía si llego a ser cirujano o forense. Sé que va a ser muy difícil y me voy a encontrar muchos problemas por el camino, pero como dice la profesora, no me voy a rendir. Voy a seguir luchando por lo que quiero ser.
                                        
                                                      Adrián Manzano Rabadán, 1º B

sábado, 14 de noviembre de 2015

Tiberia

Esta anécdota,  que inicia la serie de otras  que podéis leer en el blog,  es un ejercicio realizado en la clase de lengua a propósito de una actividad del libro de texto.


Os voy a contar unas anécdotas de una perra llamada Tiberia que tenía mi abuelo cuando era pequeño.

La gente solía ir a la casa de mi abuelo para ver a Tiberia y comprobar si era verdad lo que hacía, porque parecía increíble.
Un día fueron unos hombres y le trajeron unas costillas a la perra. En aquellos tiempos se pasaba mucha hambre, así que los hombres le dijeron a mi bisabuelo que hiciera que el animal no se comiera las costillas hasta pasada una hora. Entonces mi bisabuelo le dijo: "¡Tiberia, no te comas las costillas!". La perra se quedó acostada, mirándolas sin hacer nada, y a la hora le dijo: "¡Tiberia, ya te las puedes comer!" Y no tardó ni un segundo.
Otro día que mi abuelo y sus hermanos venían de trabajar en la huerta, que estaba a uno o dos kilómetros de su casa, se dieron cuenta al llegar de que se les habían perdido las llaves, entonces mi abuelo dijo: "¡Tiberia, tráenos las llaves!" y la perra se fue, volviendo al rato con ellas en la boca.
También una noche la perra no paraba de ladrar y de dar golpes a la puerta, mis bisabuelos, mi abuelo y sus hermanos pensaban que solamente era que Tiberia tenía frío y quería entrar, pero a la mañana siguiente se dieron cuenta de que les habían robado y que la perra solo les estaba avisando.
Viendo todo lo que hacía el animal, mi bisabuela le hizo una cesta para que fuera a comprar y a llevar cosas que se le habían olvidado. Simplemente cogían un papel y escribían lo que querían. Luego le decían que fuera a algún lado,  la perra se iba y volvía con lo que le habían escrito, incluso con comida.
¡Ojalá hubiera conocido yo a Tiberia,  era increíble!

       Carmen García Vicente. 3º B

Una medusa gigante

Una tarde de verano hace 26 años mi padre y su primo decidieron, como algunas otras tardes pues veraneaban por allí cerquita, ir a bucear a Isla Plana.
Al cabo de un buen rato buceando y viendo especies distintas de peces, acordaron seguir un poco más, hasta que llegaron al cortado de 15 metros. Mi padre, por seguridad,  se quedó arriba observando la inmersión de su primo y para que en caso de que ocurriera algo extraño, avisarle rápido.
Pues bien, hubo un momento en el que desde la perspectiva de mi padre se veía algo que le sorprendió: una gigantesca medusa de casi dos metros de ancha. En ese momento bajó a donde estaba su primo para avisarle de lo que estaba ocurriendo.
Decidieron acercarse con sumo cuidado para contemplarla, pues no era nada normal ver una medusa como esta tan grande. Pudieron observar la capucha de la medusa,  era como una pecera llena de pececillos lilas.
Cuando empezó a caer la tarde, decidieron volver ya que empezaba a ser peligroso, aunque les hubiera encantado haber podido llevar una cámara acuática para fotografiar  esta espectacular medusa.
Para ellos fue una tarde inolvidable.

             Gema Fuentes Ros. 3º B

viernes, 13 de noviembre de 2015

Anécdota

Una mañana me levanté para ir al instituto, como todas, cansada y sin ninguna gana de despertarme porque hacía frío, o por lo menos yo lo tenía.
Pero, como todos los días, hice un pequeño esfuerzo para levantarme, me costó mucho, parecía que me había quedado pegada a las sábanas, Y, como siempre, me lavé la cara para despejarme un poco, me aseé, me vestí, me preparé mi bocadillo, me tomé mi pequeño desayuno, cogí la mochila, las llaves y me fui tan campante al instituto. Cogí el ascensor porque a esas horas ¿a quién le apetece bajar escaleras? Al salir, me encontré con mi vecino Manolo que me dijo: "¡Qué madrugadora estás hecha!"
En ese momento me paré a pensar y me di cuenta de que el cielo estaba un poco más oscuro que normalmente, pero no le di importancia. Así que me acordé de que desde la esquina de mi calle se ve el reloj de la iglesia y eran las seis y media pasadas. Subí a mi casa corriendo y allí estaba mi madre hecha una furia, pero cuando se lo conté se puso a reírse,  aunque le había dado un buen susto.
Lo mejor de todo es que a pesar de haberme levantado dos horas antes, llegué tarde a clase porque me di cuenta de que me había dejado un trabajo de Sociales que tenía que presentar con Carmen y Elizabeth, así que tuve que volver corriendo a mi casa y regresé unos cinco minutos después.

      Noelia Pérez García. 3º B

Género dramático o teatral. Una experiencia en el Teatro Villa de Molina y diferentes opiniones


LAS AVENTURAS DE TARIK Y SALAH

Algunos alumnos/as de 1º ESO en la puerta del teatro
con dos de las profesoras acompañantes


Hoy- por el martes 10 de noviembre- hemos ido al Teatro Villa de Molina. Hemos visto una obra titulada "Las aventuras de Tarik y Salah". Me ha gustado bastante.

Trataba sobre una pareja de amigos que se van de viaje en un barco. En el camino hay una gran tormenta y acabaron en una playa. Allí deciden que cada uno tomaría su camino. Salha, al que le encanta la naturaleza, se encontró con un hombre y le dijo que si trabajaba, conseguiría su sueño. Se puso a trabajar cortando las naranjas del árbol y de todos los que había en aquel campo. Cuando Salha se dio cuenta de que así no conseguía cumplir su sueño y que se estaba aprovechando de él, se fue a la playa a buscar a su amigo.

Con Tarik pasó algo parecido. A Tarik le encantaban los coches y soñaba con llegar a ser un gran piloto de carreras. Tarik se fue a la ciudad y un señor le ofreció dinero a cambio de lo que llevaba en su mochila. Tarik aceptó. Aquel hombre lo convenció para que trabajara mucho, se hiciera un motor y así cumpliría su sueño. Cuando Tarik llevaba largo rato sin parar de trabajar a un gran ritmo y no podía hacer otras cosas, se dio cuenta de que ese no era su sueño. Así que  él también se escapó de aquello y se fue a la playa a buscar a su amigo Salah. Allí se encontraron y volvieron a estar juntos.

Una cosa que me ha sorprendido bastante es lo bien que han representado con muy pocas cosas. Han puesto fondos diferentes con imágenes proyectadas. Por ejemplo, en la escena de la playa, ha salido en la pantalla una playa.

En general, ha estado muy bien.
                                                                                            Paula Rodríguez, 1º A


"Me ha parecido un teatro un poco infantil, pero reconozco que fue precioso, porque sirve para saber que no hay que dejar a un amigo, si no puedes pasarlo muy mal sin él. Es un teatro educativo".
                                                                                                          
                                                                                                   Natalia Matas, 1º B

"Me ha llamado la atención porque son cosas que pueden pasar en la vida real, que dos amigos tengan sueños diferentes y que se separen para cumplirlos, pero sean tentados por personas que los ponen a trabajar como esclavos. Al final se dan cuenta de que esos no son los sueños que querían cumplir y se escapan" . Marina García, 1º A


"Cantaron un rap sobre la amistad",                          Alejandro Puche, 1º A  


"El final de la obra fue muy bonito y me hizo reírme mucho. Espero volver. Aparte, me encontré con mis viejos amigos del Cervantes. Quiero que se repita, la verdad". Omayma Chay, 1º A


"Cantaron tres canciones durante la actuación, por cierto, fue magnífica. Mi canción favorita: "Un uno es un uno y no un dos, pero uno y uno son dos. Un uno es un uno y no un dos, pero uno y uno son dos". 
Durante la actuación, uno de los personajes malos dijo: "Me llamo Rufino, de rufián, Rufino, rufián" y Mari Sol me dijo que luego buscara en el diccionario su significado. Lo he encontrado y he visto esto:

rufián : 1. Hombre vil y despreciable que vive del engaño y de la estafa.
                 2. Hombre dedicado al tráfico de la prostitución.

En el teatro uno de los personajes que quería engañar al chico dijo que se llamaba Rufino, de rufián. Lo entendemos.
De los dos personajes, me gustó más Salah, porque veía todo con mucha gracia. Pues, curioso, a mi mejor amigo también le ha gustado más Salah. Adiós".  Roberto Carlos, 1º B


"Hemos visto la actuación de dos chicos muy graciosos que nos mostraban su vida como amigos. A mí, por lo menos, me ha hecho mucha gracia que la liaban cada dos por tres, no paraban de picarse ente ellos. La actuación ha durado una hora. Hemos salido y hemos vuelto a nuestras vidas como estudiantes en el instituto. Y por cierto,  gracias a nuestra profesora Mari Sol por hacer que esta salida haya sido posible". Pablo Nicolás Solorzano, 1º D

                                                        
" A mí me ha gustado mucho porque algunas veces hacían muchas tonterías. Los actores eran muy divertidos. El teatro estuvo muy bien porque ponían música, cantaban y bailaban rap. Cuando ya estaban terminando, se bajaron del escenario y fueron a chocarle las manos a todos los niños espectadores.
El teatro iba sobre la amistad". Mélody Alacid Herrero, 1º A


"La moraleja de la historia es que algunas cosas no hay que hacerlas solos, sino con alguien. 
Me ha gustado bastante esta historia y creo que Mari Sol ha elegido muy bien la obra. Os recomiendo verla si tenéis oportunidad".  Juan Fernández, 1º D



Un día de verano


Un día de verano mi padre y mis tíos estaban jugando al escondite en la calle, como antiguamente se hacía.

Mi tía, que era la más pequeña de los hermanos, se escondió en un tubo muy grande que había, ya que estaban haciendo obras en la calle, y como estaba un poco gordita no podía salir. Ella, gritando, llamó a mi padre, que era el mayor; y él, como los locos, cogió lo primero que vio e intentó romper el tubo.
Los vecinos, al ver que había tanto jaleo en la calle, salieron e intentaron ayudar a mi padre. Pero no había manera, lo intentaron con todo: aceite, mantequilla... 
Al final, uno de los vecinos que era carpintero y acababa de venir de trabajar, cogió una sierra y entre él y mi padre partieron el tubo, y por fin, lograron sacar a mi tía.
¡Ella había ganado al escondite, fue la que mejor se escondió!


       Andrea Gomariz Bernal. 3º B

Media tarde


Mi madre me habla del día en el que no encontraron a mi tío, del día en el que él ganó al escondite.
Mi abuela, histérica, gritaba su nombre por todo el  barrio; fue a buscarlo al taller de don Luis, donde tantas horas pasaba, pero ni huella de mi tío.
Quizá por ser la época que era, cuando los niños salían a jugar a la calle, a ninguno de los policías se le ocurrió pensar que estaba cansado y no quiso salir.
Quizá por la histeria, a nadie se le ocurrió mirar en el baúl de mimbre que descansaba a los pies de la cama de mis abuelos.
Aquel día, gracias a una siesta de media tarde, ganó al escondite.

                Adrián Castellón. 3º B

jueves, 12 de noviembre de 2015

La casa del terror

Juan y unos amigos suyos se quedaron en su casa a dormir aquella noche fría. Sus padres les habían dejado solos porque se fueron a cenar aquella noche.
Cuando se sentaron todos juntos, se preguntaron qué hacer y Juan propuso ver una película de terror, A todos les pareció bien, así que lo hicieron.
Estaban todos viendo la película cuando de repente oyeron un gran golpe en el piso de arriba. Todos se asustaron menos Juan, que les dijo a sus amigos que los muebles crujían de vez en cuando, o que una corriente de aire podía haber cerrado una ventana de golpe. No los convenció, pues ellos pensaban que el golpe había sido muy muy fuerte. Juan, al ver que sus amigos estaban aterrorizados, decidió subir al piso de arriba para ver qué había provocado el golpe. Vio la ventana de su habitación abierta y entonces entendió por qué había sonado tan fuerte, así que la cerró y volvió con sus amigos. Todos se tranquilizaron un poco y siguieron viendo la película, hasta que de pronto...¡PUM!. otro golpe más, incluso más fuerte que el anterior. Juan no se lo podía creer,  después de haber cerrado su ventana, qué podía ser. Los amigos se taparon con la manta para paliar el miedo. De nuevo se volvieron a oír pasos arriba, eran de alguien que estaba bajando las escaleras. 
Cuando ya estaban a punto morirse de miedo, aparecieron los padres de Juan gritando: "¡Feliz día de los inocentes!". 

     Sergio González. 3º A

miércoles, 11 de noviembre de 2015

Bullying

Esta palabra de origen anglosajón se refiere al acoso escolar y a toda forma de maltrato físico, verbal o psicológico que se produce entre escolares de forma reiterada y  a lo largo del tiempo.
Suele tener lugar en el aula y en el patio de la escuela y afecta sobre todo a niños y niñas de entre 12 y 15 años.
El acosador molesta a su víctima de distintas maneras, contando en muchas ocasiones con la complicidad del resto de los compañeros.
Las consecuencias del "bullying" pueden ser: psicológicas, como el temor a ir al colegio, mostrarse retraído, o también puede derivar en golpes o agresiones físicas.
No hay que olvidar que el acoso puede llevarse a cabo también a través de las redes sociales, recibiendo el nombre de "cyberbullying".
El acoso nos impide ser quienes realmente queremos ser, nos impide expresarnos libremente y nos vuelve personas inseguras. El primer paso para evitar el acoso es identificarlo y pedir ayuda, nunca callar y dejar que el problema continúe.
Y si estás siendo testigo de un acoso, por favor, ¡¡NO TE CALLES!!
     
Agustín Martínez García. 3º B

Lo etéreo

Lo que no se ve
pero se siente,
eso es lo etéreo.
Como el viento,
como aquellas personas
que no son queridas
ni se sienten integradas
en la sociedad.
Almas solitarias
que vagan
sin rumbo
por este mundo.

         Mario Redondo. 3º B

jueves, 5 de noviembre de 2015

QUIRÓFANO, RADIOLOGÍA Y PROTECCIÓN



Se cometen muchas faltas de ortografía a diario, pero no deberían aparecer en edificios públicos como puede ser un hospital. Lo extraño es que las cometan solo en algunos carteles y en otros no siendo la misma palabra. Puede que sea porque algunas personas siguen creyendo que las mayúsculas no se acentúan,pero están equivocadas.

En la primera imagen, se puede apreciar que en la palabra "QUIRÓFANO" no está acentuada la "o", pero como es una palabra esdrújula debería llevar tilde.

En cuanto a la segunda imagen, no han acentuado "RADIOLOGÍA", pero debería estarlo porque se rompe un diptongo. "PROTECCIÓN"  es aguda acabada en "n".

                                                                                           Eva María Semitiel, 1º B