Hoy (por el martes 23 de mayo) ha tocado Lengua a 1ª hora. La verdad es que no me gustan las clases a primera hora, porque muchos solo tenemos los ojos entreabiertos por el sueño. Pero tratándose de la clase de Lengua, no se me hace tan aburrida.
En cuanto entró al aula, Mari Sol pasó lista y preguntó si había algo voluntario. Me sorprendió que hubiera tres diarios de clase, ya que ahora que no está el cuaderno de los diarios, todos los que escribamos no serán obligatorios.
La profesora mandó a Ainoa a la pizarra para corregir los deberes. Había que analizar morfológicamente los sustantivos, adjetivos y verbos del texto titulado "Doña Araña". Creo que la mayoría los clasificamos bien.
Después Laura, Ainoa y Juan leyeron sus diarios. Siempre que alguien lee su texto, me quedo embobada como si fuéramos pequeños y nos estuvieran contando un cuento. Después nos mandó que escribiéramos este diario, pero ahora era obligatorio (no había más deberes).
Supongo que esta clase ha podido hacerse ligera e interesante por nuestro buen comportamiento.
Carmen Mª, enhorabuena por este texto que ha gustado a toda la clase y muchas gracias por la parte que me toca como profesora.
ResponderEliminarMe ha gustado especialmente la imagen que utilizas de quedarse embobada ante la lectura de un cuento.Es verdad que cuando se hace el silencio para escuchar el diario de un compañero/a, disfrutamos el momento. Y es que nuestros diarios no son cuentos, pero pretenden ser textos narrativos muy personales que lleguen a los compañeros y a los lectores del blog. Tú lo has conseguido y por eso estás aquí. Un saludo y a seguir atenta en clase; es una buena fuente de inspiración.