Tras un largo rato de travesía, por fin, Marta y Juan llegaron al cruce.
-Creo que deberíamos ir por la derecha, el camino es más largo y a la vez más seguro.- Marta se interrumpió-. ¿Qué?
-¡Corre! - dijo Juan agitando las riendas de su caballo.
De repente, una criatura de grandes dimensiones saltó hacia Marta con un grito de guerra.
-¡Marta! ¡No!
Pero estaba demasiado lejos como para poder hacer algo por ella. Cuando llegó, lo único que encontró fue un caballo asustado y una pálida joven que no volvería a respirar.
Ana, enhorabuena por tu texto. has conseguido crear un ambiente misterioso y dramático con brevedad y rapidez, puesto que lo acabaste en unos minutos en clase.
ResponderEliminarSigue escribiendo porque se te da muy bien.