Mi
nombre, Irene, me lo pusieron mis padres porque les gustaba mucho; además, la
tía de mi abuela paterna se llamaba así.
Irene
significa Paz y el día de mi santo es el 20 de octubre. Yo me parezco mucho a
mi nombre porque soy muy pacífica.
Mi
nombre, normalmente, se dice así, tal cual es. No tiene ningún diminutivo ni
ninguna abreviatura, ya que todo el
mundo me llama Irene.
Hay personas famosas que se llaman así, como
por ejemplo Irene de Grecia, que es princesa de Grecia y hermana de nuestra reina
Sofía.
A mí
me gusta mi nombre y no me lo cambiaría por nada del mundo.
Irene
Martínez García 1º B
Muchas gracias, Irene, por dedicar un tiempo a escribir sobre tu nombre y querer compartirlo con los lectores de este blog. Es un nombre precioso, en su fonética y en su significado. Ojalá las personas fuéramos capaces de crear la PAZ para todos los países y sintiéramos que los otros, los demás, son también personas como nosotros, son nuestros hermanos. Un saludo. Mari Sol
ResponderEliminarMuchas gracias Mari Sol por subir mi texto y el de Teresa
ResponderEliminarUn saludo a los lectores de Ágora Digital