DIARIO VOLUNTARIO DE ANDREA GOMARIZ, 1º B

Martes 4 de febrero de 2014, 3ª hora, antes del recreo.

Diario, hoy no es un día normal de la clase de Lengua, hoy hemos tenido un par de visitas inesperadas. Antes de desvelar cuáles son esas visitas, voy a contarte lo que ha pasado.

Al principio de la clase, Mari Sol tuvo que ir a no sé dónde para hacer no sé qué, y en  ausencia de la profe vino el director y nos preguntó que si estábamos solos. Ángela, que no se puede estar callada, le dijo que a Mari Sol le había dado un bajón de azúcar y había bajado a la cantina a tomar algo. A los cinco o séis minutos llegó la profesora y ella  nos insistió en que quien le dijera qué eran los determinantes y cuántos  tipos  hay, le pondría dos positivos. Gema, que fue la primera en contestar, se los dijo y ganó su premio y una sonrisa orgullosa.

Bueno, hasta ahora he aguantado las visitas sorpresa y como no puedo más, te voy a decir quiénes eran. La primera se trataba de un par de trabajadores que venían a revisar la pizarra digital. Lo que yo no entiendo es cómo puede molestar tanto una revisión de una pizarra digital; pero en fin, qué se le va a hacer, tardaron unos veinte minutos. La segunda visita a mí me alegró mucho porque me encanta recibir visitas y porque en este caso se trataba de unos chicos de 2º Bach. que nos comunicaban que había una reunión en el recreo por la huelga contra la LOMCE. Este tema nos tuvo alborotados a todos hasta la hora de tutoría. Allí nos dijo la tutora que los de 1º y 2º ESO no tenemos derecho a huelga.

Mari Sol se alegró mucho al ver que ya no había más visitas y pasó a mandar los deberes, cosa que no me gusta de las clases, ¡¡uff!! Empezamos a hacerlos allí, con un murmullo que procedía tanto del sureste como del suroeste del aula. Mientras que yo tomaba todas estas notas, tocaron a la puerta por tercera vez y...¿quién era en esta ocasión? ¡¡María!! que estaba mala pero nos dijo que hoy ya no tenía fiebre y por eso había decidido ir al instituto. A los veinte segundos sonó el timbre y yo salté de alegría porque me tenía que pasar por un sitio que no voy a nombrar.

                                                                                           ¡¡Hasta la próxima!!