MANUAL DE VIDA
Posiblemente podría poner en cadena muchos de los tópicos literarios, pero hoy es momento de centrarnos en uno, pues si nos pusiéramos a desarrollar podríamos pasarnos la vida aquí, filosofando y debatiendo entre papel y tinta. Me centraré en el PEREGRINATIO VITAE, que traducido significa "el viaje de la vida", la vida como un viaje, como un camino.
Habrá muchas formas de entender la vida, tantas casi como personas. Para mí la vida es un camino, un camino corto pero ancho, donde lo que más me inspira a seguir es la curiosidad del saber en concreto, el afán por conocer, por avanzar; por, de alguna forma, vivir esperando esos momentos, el futuro; en una palabra, la incertidumbre del vivir.
Considero que nuestra vida es pura inercia hasta que, al encontrarnos, decidimos cambiar el rumbo, tomar otro sentido, encontrar nuestra propia verdad. Y es que para andar este sendero, a veces cuesta arriba, a veces cuesta abajo; llano, rocoso, con pinchos, saltando charcos, es necesario conocerse, amarse y aceptarse a sí mismo antes que a nadie, precisamente para poder conocer, amar y aceptar al resto de personas. Por no hablar de los millones de sentimientos que nos albergan, malos y buenos, de todo tipo. Todo esto acompañado de tantas preguntas sin respuesta que nos pondrán en duda más de una vez. Este camino no es de extremos, dado que existen los polos opuestos y el sinsentido. Cada uno comenzará a andar descalzo, hasta que con el paso de los años, y poco a poco, nos iremos fabricando y tejiendo nuestros propios zapatos.
¡Y qué mejor aceptación que la de la muerte!. Pues la vida es una bella mentira y la muerte una triste realidad. Aun así, el pesimismo a nada conducirá, y mejor vivir bailando y disfrutando que quedarnos sentados llorando porque sabemos que esto tiene un final. ¿Y si todo ha sido un sueño?
Noelia Bernabé, 2º Bach.
Muchas gracias, Noelia, por querer compartir tu reflexión con los lectores de este blog. Sabes que nos ha gustado mucho a todos tus oyentes en clase.
ResponderEliminarQuería hacerte una observación a tu metáfora de los zapatos o la falta de ellos cuando empezamos a caminar. Yo sí veo que todos llevamos unos "zapatitos", los que nos han "fabricado" nuestros padres, nuestra familia como ellos han sabido, y con esos empezamos a funcionar hasta que nos damos cuenta de que no se ajustan del todo como queremos a nuestro modelo, y entonces empezamos a buscar unos propios con los que sentirnos más felices. Ser conscientes de esto es un paso de gigante y tú lo estás dando. Mi enhorabuena por esa madurez que tienes; te conducirá por el camino que tú quieras transitar.
Muchas gracias por el reconocimiento, Mari Sol. Es de agradecer que mis pequeñas reflexiones se vean expuestas y se compartan a debate. Seguramente muchas personas piensen como yo pero no encuentren el modo de expresarlo, o se lo guarden para sí mismos. La vida está para compartirla, nuestros puntos de vista, nuestras vivencias, casi todo; en general. No sé si esto es dar un paso de gigante, pero en mi interior existe algo que me grita y es lo que mi conciencia traduce, mi boca habla y mi mano escribe.
EliminarEspero que mis compañeros y yo sepamos calzarnos de la mejor forma, esto solo acaba de comenzar.