Una nueva aventura de Tom Sawyer. Francisco G. Alcaraz (1º C)

Tom  consiguió formar su banda con cuatro amigos. Tenían dinero, armas y un escondite; también consiguió que Becky le perdonara por el comentario de su ex novia y volvieran a ser novios. Ella también se unió a la banda, solo que se quedaba en la guarida protegiéndola y cuidándola por decisión propia. Tom no dejó entrar al final en la banda a Huckelberry, ya que no quería que hablaran mal de ellos, pero siempre que quisiera podía ir al escondite, aunque la viuda Duglas no le dejaba salir tan tarde. Él se escapaba y, a pesar de que seguía queriendo a la viuda Duglas,  no le gustaba la forma de vida que le ofrecía.

Tom Sawyer se metió en un grave problema: había intentado robar a unos forasteros junto a su banda. Resultaron ser policías vestidos de paisano; sus compañeros pudieron salir corriendo, pero Tom fue conducido a la comisaría. Por suerte, en el gorro llevaba ganzúas para salir de la celda y huir corriendo. Se escondió en un lugar secreto y sus amigos en sus casas. La tía Polly estaba preocupada, pero Huck fue a decirle que se había quedado dos noches a dormir en casa de la viuda Douglas y que estaría un día más allí. Al día siguiente Tom fue a su casa para decirle a la tía que estuviese tranquila.

Al final el Sheriff olvidó aquel incidente, que consideró una chiquillada, y se le olvidó también su cara. Tom se libró de una buena;  después de aquella mala experiencia no quiso volver a ser bandido, así que el escondite lo tenían para hablar o jugar a bandidos y el resto de las cosas se quedaron bajo una  sábana.

Nota: aquí se os muestra el dibujo de la portada del trabajo de Francisco G. Alcaraz, de 1º C ESO, que fue calificado como el mejor de la clase. Espero que os guste y admiréis las cualidades del autor para dibujar.